HATTIE MCDANIEL Y EL RACISMO EN HOLLYWOOD

Hoy quiero dejar a un lado mis chistes de humor “negro” para hablaros sobre el “racismo” en Hollywood. Ha habido tantos casos de racismo en “la fábrica de sueños” como mujeres en la cama de Charlie Sheen, pero hoy en concreto voy a hablaros de uno que me indignó más que el Oscar que se llevó Penélope Cruz. Tiene por protagonista a Hattie McDaniel, más conocida como la criada negra y sobre todo delgada de Lo que el viento se llevó.

Para los daltónicos, Hattie es la de la derecha.

Hija de esclavos liberados, Hattie, a parte de ser una gran actriz, fue cantante y compositora, convirtiéndose en la primera mujer negra que cantó en una emisora de radio estadounidense. También destacó por su activismo social. En 1939 se produjo el esperado estrenó de Lo que el viento se llevó. McDaniel no pudo asistir ya que la ley segregacionista que estaba en vigor en el estado de Georgia prohibía a las personas de raza negra asistir a este tipo de eventos. Hattie había forjado una buena amistad con el siempre elegante Clark Gable que hizo todo lo posible para que la actriz pudiera asistir al estreno. No tuvo éxito. Meses más tarde, cuando McDaniel se disponía entrar en la gala de los Oscar nominada a Mejor actriz de reparto, le “invitaron” a que entrara por la puerta de atrás. Al enterarse Clark Gable intercedió más contundentemente, amenazando con no asistir a la gala si Hattie no entraba como el resto de actores por la puerta principal. Esta vez Clark si lo consiguió, aunque fueron los invitados de McDaniel los que tuvieron que entrar por la puerta de atrás. Hattie terminó ganando el Oscar, un logro que no se repetiría hasta 1963, año en que Sidney Poitier lo ganó por su papel en Los lirios del valle.

Una mujer afín al Ku Klux Klan entrega el Oscar
a la buena de Hattie.

La actriz falleció en 1952 a los 57 años y no pudo ser enterrada en el cementerio de Hollywood, como era su deseo. El propietario del cementerio se negó a que alguien de raza negra recibiese sepultura en tan selecto emplazamiento. En 1999, el nuevo propietario del cementerio quiso enmendar el error del pasado e intentó trasladar los restos mortales de la actriz que reposan en el Cementerio Rosedale, pero sus herederos declinaron la oferta.